Con la siempre incógnita presente en la 1º carrera del año sobre quien está bien y quien no, las 10 escuderías llegaban a Australia durante la semana para comprobar si sus espectativas eran las correctas.
Con un viernes de mayor trascendencia de lo habitual, por ser el primero, y un Rosberg dominando con cierta holgura en las sesiones libres, se llegó a un sábado lleno de expectación, donde ya no había lugar para los engaños.
Lo cierto es que hasta la sesión de calificación, todos los equipos habían dejado ver su potencial real, pero es algo que el sábado a media tarde (Hora australiana), quedó confirmado: Brown GP (Antiguo Honda), Toyota y Williams parecían los más fuertes, Ferrari y Red Bull eran capaces de realizar una buena labor, y algunos otros como Sauber-BMW ofrecían alguna pincelada de calidad, técnicamente hablando. Renault prometía en pretemporada, pero el sábado se quedó en nada, igual que McLaren-Mercedes, aunque estos ya avisaron días antes que su coche estaba bastante por debajo de lo que ellos esperaban.
Toro Rosso y Force India cerraban el pelotón, si bien es cierto, que aunque algunas escuderías dominaban, omitiendo a Brown GP, las diferencias entre todas eran muy escasas (Por ejemplo, en la Q2, entre el 3º (Vettel) y el 14º (Kovalainen), no había ni un segundo de diferencia). Esto además quedó corroborado con la idea de la FIA de publicar, por primera vez y será asi a lo largo de todo el año, las cargas de gasolina de todos los coches horas después de la sesión de clasificación.
En la carrera, siempre impredecible, sucedieron cosas en todo momento. Desde un Kovalainen negado y obligado a abandonar por la tradicional melée de la 1º curva de Australia (Iniciada y provocada por una horrible salida de Rubens Barrichello), hasta un Vettel soberbio, que en un segundo y medio tiró por la borda el perfecto trabajo realizado durante una hora y media.
Tras la salida, y la estabilización de las posiciones, las estrategias empezaron a jugar, con los dos Ferrari, Kubica y Hamilton apostando por un 1º stint corto con las ruedas super blandas (En este GP, las malas), otros como los dos Renault, con una estrategía pesada, y otros, como varios coches del top-10, con una estrategia más 'moderada y estándar'. Cuando se atravesaban las vueltas donde la mayoría habían de realizar las primeras paradas (Dominaba Button, seguido de cerca por Vettel y a un mundo, pero detrás, Kubica, los dos Ferrari, Rosberg y Barrichello) en la vuelta 18, un accidente de Nakajima obligó a la salida del Safety Car, que como siempre, provocó las prisas en todos y una pequeña reorganización de la clasificación, sobretodo en la zona media.
Tras el relanzamiento (Vuelta 24), un desafortunado Nelsinho Piquet trompeó en la 1º frenada y acabó con su carrera al irse a la grava, cuando rodaba 7º. De ahi hasta las últimas 10 vueltas se vieron muy buenos detalles, como un Hamilton que se marcó un gran stint de 32 vueltas (Desde la 11 a la 43) para meterse provisionamente en la zona de puntos, un Alonso que peleaba con los Toyota para rondar la zona de Top-10, un Vettel que estaba siendo capaz de aguantar el ritmo de Button, o un Buemi que estaba dando el do de pecho y no renunciando a meterse en la zona de puntos. Entonces es cuando el equipo Ferrari tuvo unos minutos negros que le dejaron sin ninguna opción para sumar puntos. Primero, Räikkönen trompeaba y chocaba (Aunque sin mucha fuerza), contra uno de los muros, lo que le dejó en la 16º posición, y posteriormente Massa, con problemas mecánicos que no han trascendido, tuvo que aparcar en su garaje.
Las últimas 10 vueltas fueron una locura, puesto que muchos coches tenían que calzar los neumáticos super blandos, que se degradaban muy rápidamente (En unas 4 vueltas), y entonces empezaron a producirse bailes en la clasificación. Primero, Rosberg, que rodaba 4º, perdió en apenas un par de vueltas 5 posiciones, muchos veían afectado su ritmo, y Kubica (3º) empezaba a presionar a Vettel para tratar de conseguir un puesto más alto en el podium. Entonces llegó, cuando solo quedaban 3 vueltas, una de las imagenes del GP.
Kubica, mucho más rápido, trata de adelantar por el exterior a Vettel en la Curva 2, Vettel no cede, y al final ambos se tocan, con el destrozo de los coches y el abandono de ambos. Esto provocó que todos los que iban detrás ganaran 2 posiciones, y la salida por 2º vez, del Safety Car, que cerró la carrera.
Button ganó, Barrichello quedó 2º y un grandisimo Trulli, que había salido desde el pit, 3º. Hamilton llegó 4º, Glock 5º y Alonso 6º. La zona de puntos la cerraban Rosberg y el debutate Buemi. Pero a poseriorí, Trulli fue penalizado por adelantar a Hamilton cuando el Safety Car ya estaba en pista con 25 segundos, lo que provocó la subida de todos una posición, incluyendo a Bourdais que sumó el último punto. También Vettel será sancionado con 10 posiciones en Sepang por el incidente con Kubica, decisión polémica, ya que en principio todo indicaba que quedaría como 'lance de carrera'.
Brown GP ha demostrado que su ritmo es infernal, y eso que su motor Mercedes, aunque interesante, no es de los que más velocidad punta ofrecen, asi que es todo chasis. Toyota y Williams, han dado mucha guerra, cuando no eran de los favoritos. Y todo gracias a un polémico difusor, que dentro de 2 semanas será ratificado o decrado como ilegal. Por otro lado, el innovador KERS, no parece ser una 'joya', ya que solo dos pilotos que lo llevaban (Hamilton y Alonso) acabaron sacando algo positivo de Australia.
En principio parece que los polémicos difusores ganan al KERS y que las grandes Escuderías, de momento, no son tan grandes. Ferrari se lleva un 0 de Australia, igual que Sauber-BMW. McLaren-Mercedes se lleva un extraordinario premio con los 6 puntos de Hamilton, y Renault otro algo menor con los 3 de Alonso, a pesar de no tener de momento, ni de lejos, un coche para conseguir eso en condiciones normales. Brown GP, Toyota, Williams y Red Bull, de momento corren más.
El 2º capítulo de este Mundial, el domingo 5 de abril a las 11.00 am (Hora de España)
Con un viernes de mayor trascendencia de lo habitual, por ser el primero, y un Rosberg dominando con cierta holgura en las sesiones libres, se llegó a un sábado lleno de expectación, donde ya no había lugar para los engaños.
Lo cierto es que hasta la sesión de calificación, todos los equipos habían dejado ver su potencial real, pero es algo que el sábado a media tarde (Hora australiana), quedó confirmado: Brown GP (Antiguo Honda), Toyota y Williams parecían los más fuertes, Ferrari y Red Bull eran capaces de realizar una buena labor, y algunos otros como Sauber-BMW ofrecían alguna pincelada de calidad, técnicamente hablando. Renault prometía en pretemporada, pero el sábado se quedó en nada, igual que McLaren-Mercedes, aunque estos ya avisaron días antes que su coche estaba bastante por debajo de lo que ellos esperaban.
Toro Rosso y Force India cerraban el pelotón, si bien es cierto, que aunque algunas escuderías dominaban, omitiendo a Brown GP, las diferencias entre todas eran muy escasas (Por ejemplo, en la Q2, entre el 3º (Vettel) y el 14º (Kovalainen), no había ni un segundo de diferencia). Esto además quedó corroborado con la idea de la FIA de publicar, por primera vez y será asi a lo largo de todo el año, las cargas de gasolina de todos los coches horas después de la sesión de clasificación.
En la carrera, siempre impredecible, sucedieron cosas en todo momento. Desde un Kovalainen negado y obligado a abandonar por la tradicional melée de la 1º curva de Australia (Iniciada y provocada por una horrible salida de Rubens Barrichello), hasta un Vettel soberbio, que en un segundo y medio tiró por la borda el perfecto trabajo realizado durante una hora y media.
Tras la salida, y la estabilización de las posiciones, las estrategias empezaron a jugar, con los dos Ferrari, Kubica y Hamilton apostando por un 1º stint corto con las ruedas super blandas (En este GP, las malas), otros como los dos Renault, con una estrategía pesada, y otros, como varios coches del top-10, con una estrategia más 'moderada y estándar'. Cuando se atravesaban las vueltas donde la mayoría habían de realizar las primeras paradas (Dominaba Button, seguido de cerca por Vettel y a un mundo, pero detrás, Kubica, los dos Ferrari, Rosberg y Barrichello) en la vuelta 18, un accidente de Nakajima obligó a la salida del Safety Car, que como siempre, provocó las prisas en todos y una pequeña reorganización de la clasificación, sobretodo en la zona media.
Tras el relanzamiento (Vuelta 24), un desafortunado Nelsinho Piquet trompeó en la 1º frenada y acabó con su carrera al irse a la grava, cuando rodaba 7º. De ahi hasta las últimas 10 vueltas se vieron muy buenos detalles, como un Hamilton que se marcó un gran stint de 32 vueltas (Desde la 11 a la 43) para meterse provisionamente en la zona de puntos, un Alonso que peleaba con los Toyota para rondar la zona de Top-10, un Vettel que estaba siendo capaz de aguantar el ritmo de Button, o un Buemi que estaba dando el do de pecho y no renunciando a meterse en la zona de puntos. Entonces es cuando el equipo Ferrari tuvo unos minutos negros que le dejaron sin ninguna opción para sumar puntos. Primero, Räikkönen trompeaba y chocaba (Aunque sin mucha fuerza), contra uno de los muros, lo que le dejó en la 16º posición, y posteriormente Massa, con problemas mecánicos que no han trascendido, tuvo que aparcar en su garaje.
Las últimas 10 vueltas fueron una locura, puesto que muchos coches tenían que calzar los neumáticos super blandos, que se degradaban muy rápidamente (En unas 4 vueltas), y entonces empezaron a producirse bailes en la clasificación. Primero, Rosberg, que rodaba 4º, perdió en apenas un par de vueltas 5 posiciones, muchos veían afectado su ritmo, y Kubica (3º) empezaba a presionar a Vettel para tratar de conseguir un puesto más alto en el podium. Entonces llegó, cuando solo quedaban 3 vueltas, una de las imagenes del GP.
Kubica, mucho más rápido, trata de adelantar por el exterior a Vettel en la Curva 2, Vettel no cede, y al final ambos se tocan, con el destrozo de los coches y el abandono de ambos. Esto provocó que todos los que iban detrás ganaran 2 posiciones, y la salida por 2º vez, del Safety Car, que cerró la carrera.
Button ganó, Barrichello quedó 2º y un grandisimo Trulli, que había salido desde el pit, 3º. Hamilton llegó 4º, Glock 5º y Alonso 6º. La zona de puntos la cerraban Rosberg y el debutate Buemi. Pero a poseriorí, Trulli fue penalizado por adelantar a Hamilton cuando el Safety Car ya estaba en pista con 25 segundos, lo que provocó la subida de todos una posición, incluyendo a Bourdais que sumó el último punto. También Vettel será sancionado con 10 posiciones en Sepang por el incidente con Kubica, decisión polémica, ya que en principio todo indicaba que quedaría como 'lance de carrera'.
Brown GP ha demostrado que su ritmo es infernal, y eso que su motor Mercedes, aunque interesante, no es de los que más velocidad punta ofrecen, asi que es todo chasis. Toyota y Williams, han dado mucha guerra, cuando no eran de los favoritos. Y todo gracias a un polémico difusor, que dentro de 2 semanas será ratificado o decrado como ilegal. Por otro lado, el innovador KERS, no parece ser una 'joya', ya que solo dos pilotos que lo llevaban (Hamilton y Alonso) acabaron sacando algo positivo de Australia.
En principio parece que los polémicos difusores ganan al KERS y que las grandes Escuderías, de momento, no son tan grandes. Ferrari se lleva un 0 de Australia, igual que Sauber-BMW. McLaren-Mercedes se lleva un extraordinario premio con los 6 puntos de Hamilton, y Renault otro algo menor con los 3 de Alonso, a pesar de no tener de momento, ni de lejos, un coche para conseguir eso en condiciones normales. Brown GP, Toyota, Williams y Red Bull, de momento corren más.
El 2º capítulo de este Mundial, el domingo 5 de abril a las 11.00 am (Hora de España)
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